En las últimas décadas, la salud dental ha experimentado un avance considerable, basado en la incorporación de nuevas tecnologías a esta rama de la salud. Te ofrecemos una visión panorámica de esta transformación basándonos en describirte algunos avances concretos.
La instalación de prótesis dentales el mismo día de la colocación del implante, el blanqueamiento dental por láser o la ortodoncia invisible “Invisalign” son solo algunos ejemplos de tratamientos novedosos que se llevan a cabo gracias al uso de nuevas tecnologías.
El doctor Milton Caravaca, director de la clínica Mesiodens, una clínica dental de León que en sus 25 años de existencia no ha parado de incorporar los avances tecnológicos en su práctica habitual, nos cuenta como con el test de saliva y con el empleo de la fluorescencia, el odontólogo puede detectar todas las caries de su paciente casi al instante con una fiabilidad asombrosa.
El resultado de todas estas nuevas tecnologías dentro de la salud dental es el desarrollo de tratamientos cada vez más efectivos, menos duraderos, más precisos y, sobre todo, menos invasivos.
Quizás uno de los avances más significativos que se han dado en la salud dental es la colocación de implantes con tecnología 3D. Actualmente, se pueden diseñar y colocar implantes con una precisión milimétrica, que apenas perturban la vida habitual del paciente y que tienen muchas posibilidades de que el implante arraigue.
Hace 20 años, la colocación de implantes era una operación de cirugía invasiva que entrañaba riesgos tales como que el implante se infectara o que terminara cayéndose. Hoy, estos problemas son cada vez menos frecuentes.
Otro ejemplo lo encontramos en la ortodoncia invisible. Muchas personas, aunque lo necesitaran, se resistían a someterse a un tratamiento de ortodoncia por lo incómodo y feos que son los aparatos dentales de brakets. Este nuevo avance ha disparado la demanda de tratamientos de ortodoncia un 70%.
Medios de diagnóstico en 3D computarizados por ordenador.
Sin duda, uno de los avances que están en la base de esta transformación de la salud dental es la incorporación de los medios de diagnóstico por imagen.
Con un alto nivel de detalle, el dentista puede evaluar el estado de la dentadura del paciente y analizar el alcance real de sus dolencias. Esto permite al facultativo formular diagnósticos más precisos y diseñar programas de actuación más efectivos.
Algunos de estos novedosos medios de diagnóstico por imagen son:
- Tomografía Computarizada de Haz Cónico (C.B.C.T. o TAC Dental). Con esta tecnología, el dentista puede evaluar en su ordenador imágenes tridimensionales de la boca del paciente con un alto nivel de resolución. No solo ve la parte emergida de los dientes, también la estructura ósea maxilofacial y los tejidos blandos. Esta radiografía por ordenador, por llamarla de alguna manera, ofrece una información detallada sobre el estado de salud de toda la boca.
- Escáner Intraoral 3D. Este escáner ha sustituido las clásicas impresiones dentales que utilizaban los dentistas para encargar férulas dentales o diseñar prótesis. Este avance ha sido clave para que se pudiera aplicar con éxito la ortodoncia invisible. Gracias al escáner dental, el dentista puede obtener una réplica exacta de la dentadura del paciente en el ordenador, que no solo le ayuda a formular el diagnóstico, sino que lo puede utilizar como modelo para planificar los tratamientos.
- Radiografía Panorámica Digital (Ortopantomografía). Esta radiografía ofrece una visión de conjunto de toda la boca del paciente en una sola imagen. Incluida la estructura ósea de la mandíbula. Con ella se pueden detectar dientes no emergidos, fracturas, muelas del juicio impactadas o quistes.
- Radiografía Cefalométrica Digital. Esta es una radiografía que permite al dentista evaluar la posición de los dientes y de los huesos alveolares con respecto al cráneo. Y planificar con ella, intervenciones de cirugía maxilofacial con una mayor precisión.
Diseño CAD/CAM.
La tecnología CAD/CAM es una tecnología digital utilizada en la ingeniería industrial que se ha extendido con éxito al campo de la salud y en concreto a la salud dental.
Las siglas CAD son un acrónimo inglés que significa Computer Aided Design, en castellano, Diseño Asistido por Ordenador.
Con la tecnología CAD se crean réplicas-modelo digitales que permiten al especialista diseñar apósitos y prótesis con gran precisión.
Una de las ventajas de esta tecnología es que permite efectuar pruebas y correcciones en el modelo informático sin necesidad de tocar para nada la boca del paciente.
En la industria se empezó utilizando, por ejemplo, para diseñar piezas de precisión que se encuentran alojadas en los motores de los aviones. En la odontología se usa para diseñar prótesis dentales y, sobre todo, implantes.
Aprobado el diseño digital de una pieza, se procede a fabricarla con la tecnología CAM, Computer Aided Manufacturing, Fabricación Asistida por Ordenador.
Por medio de un sistema de fresas, dirigido por el programa informático, se fabrica una pieza exactamente igual al modelo diseñado.
En los implantes dentales, uno de los tratamientos en los que más se utiliza la tecnología CAD/CAM, con este sistema se consiguen fabricar implantes precisos que se sueldan con facilidad en la estructura maxilofacial del paciente, alcanzando un alto nivel de eficacia.
En algunas situaciones concretas es difícil colocar un implante que tenga éxito. Puede ser que el paciente haya perdido masa ósea que dificulte la osteointegración. O que haya poco espacio para colocar el implante. Gracias a la tecnología CAD/CAM, estos obstáculos se pueden sortear y el paciente puede tener al final un diente nuevo o una dentadura postiza, aun con todas las dificultades.
Nuevos materiales.
La revista Gaceta Dental indica que otro de los avances significativos que se han dado en salud dental es el uso de nuevos materiales en implantólogía; es decir, la colocación de implantes.
Una de las últimas novedades ha sido la fabricación de implantes de circonio. El circonio es un mineral cerámico que se usa bastante en odontología, como por ejemplo para la fabricación de coronas, dentaduras postizas o brakets estéticos, debido a que por su color blanco es menos llamativo.
Su uso en la fabricación de implantes permite reducir el riesgo de infección en la zona del apósito, dentro de la encía. Por sus características, el circonio resulta resbaladizo para la placa bacteriana. Cosa que no sucede con el titanio, el metal más usado en la fabricación de implantes, que puede verse cubierto de placa bacteriana que ha penetrado dentro de la encía por la herida que se abrió al colocar el implante, provocando, de esta manera, una infección grave y dolorosa.
El desarrollo de los implantes de circonio ha sido fruto de un largo periodo de investigación en el que han participado especialistas españoles como el doctor madrileño Javier de la Cruz.
Otro de los avances significativos en este campo son los llamados implantes inteligentes, fabricados con un material infundido con nanopartículas, que repelen igualmente la placa bacteriana y que cuentan con una fuente de luz que detecta los movimientos naturales de la boca, permitiendo que el implante se adapte a ellos y se suelde con más facilidad con el hueso alveolar.
Esta es una tecnología que se ha desarrollado en la universidad de Pensilvania, que se está utilizando con éxito en EE.UU. y que no es raro que en unos años podamos verla en nuestro país.
La I.A. en odontología.
El uso y desarrollo de la Inteligencia Artificial es uno de los temas candentes de la actualidad. Uno de los avances de la tecnología más relevantes y que también tiene su aplicación en el campo de la salud dental.
En el 2024, la empresa Perceptive, con sede en Boston (EE.UU.) sacó al mercado un robot equipado con inteligencia artificial que era capaz de efectuar intervenciones dentales complejas en 15 minutos.
El robot cuenta con sistemas de diagnóstico por imagen por medio de Tomografía de Coherencia Óptica (O.C.T.) que le va proporcionando información en tiempo real y que ayuda al robot a tomar decisiones en milésimas de segundo para ajustar sus movimientos.
En una entrevista concedida a la revista Con Salud, el odontólogo Pedro Guitán, experto en odontología digital, afirma que la Inteligencia Artificial y la robótica no han venido a quitarle el trabajo a los dentistas, sino a hacérselo más fácil.
Y es que la I.A. ya se está utilizando en algunas clínicas dentales en España. En Ibiza, por ejemplo, encontramos clínicas dentales que realizan tomografías computarizadas asistidas por I.A. La I.A. va guiando al cabezal que captura la imagen hacia los puntos más críticos de la dentadura del paciente. En la pantalla del ordenador del dentista, el zoom de la imagen amplia los detalles de manera automática sin intervención humana.
De esta forma, el dentista obtiene una información más precisa de la boca del paciente en mucho menos tiempo.
Pedro Guitán opina que la I.A. ayuda al dentista a formular diagnósticos más exactos y contribuye a realizar los ajustes necesarios para llevar a cabo tratamientos de mejor calidad, mayor precisión y con un tiempo de recuperación más rápido.
Con el tiempo, la Inteligencia Artificial cambiará la forma de trabajar en las clínicas dentales en beneficio de profesionales y pacientes.
Los avances que estamos viendo en la salud dental son el preámbulo de los que queda por llegar.